Uno de los miedos más habituales del colectivo celiaco es realizar comidas fuera del hogar, ya que aunque se ha avanzado considerablemente sigue existiendo mucha desinformación en el sector de la hostelería y la restauración. Este miedo aumenta cuando la persona celiaca va a realizar un viaje fuera o dentro de España, ya que supone un cambio de ubicación, la pérdida de puntos de venta conocidos y establecimientos de confianza y desconcierto sobre si en nuestro lugar de destino encontraremos todo lo necesario. Cada año cuando se acerca la época estival desde ACECALE nos ponemos a vuestra disposición para ayudaros, en la medida de nuestras posibilidades, con este tipo de información.

A pesar del apoyo que podamos brindaros, siempre que se vaya a realizar un viaje debemos ser precavidos, ya que pueden surgir imprevistos que nos hagan perder tiempo o vivir una mala experiencia, os dejamos algunos consejos:

      · Planifica tu viaje: debes tener en cuenta el lugar de alojamiento, el medio de transporte y el país donde vas a viajar. Si tienes alguna duda, contacta con        nosotros y trataremos de ayudarte.

      · Avisa siempre de que eres celiaco: no importa repetirlo las veces que haga falta hasta que estemos seguros de que ha quedado totalmente claro, es muy importante que tengan en cuenta nuestras necesidades.

· Si el establecimiento no está bajo la supervisión de alguna asociación no te aventures a pedir platos como guisos, salsas, sopas o embutidos, preferiblemente elige opciones que por naturaleza estén libres de gluten

     · Prepara un «kit de supervivencia»: con alimentos que sean fáciles de transportar y que ante un imprevisto te sirvan para suplir una comida.

     · Lleva contigo el carnet de socio de tu asociación y si necesitas transportar alimentos, un informe médico para justificar que necesitas llevarlos contigo.

     · Si no conoces bien el idioma de tu lugar de destino, solicítanos las tarjetas explicativas de la EC y la DSG en el idioma correspondiente, pues te servirá para que la persona que vaya a atenderte comprenda realmente tus necesidades.

Como decíamos antes, salir no es fácil, pero vamos perdiendo el miedo y seguiremos trabajando para que viajar y disfrutar de las vacaciones sea una gran experiencia y podamos disfrutarlo con normalidad.